Un rosario por las víctimas que unirá al mundo

Un rosario por las víctimas que unirá al mundo

  • On 27 de mayo de 2020

OMPRESS-ROMA (27-05-20) El Papa dirigirá este sábado una recitación mundial del Rosario por las víctimas de la pandemia, con una transmisión online que unirá a grandes santuarios marianos del mundo, desde Lourdes a Luján. A partir de las 17:30h, desde la Gruta de Lourdes, de los Jardines Vaticanos, el rezo señalará el final del mes de mayo, dedicado a la Madre de Dios. La iniciativa ha partido del Pontificio Consejo para la Promoción de la Nueva Evangelización. Su presidente, Mons. Rino Fisichella, ha enviado una carta a los rectores de los santuarios marianos del mundo, pidiendo que se unan al rezo del rosario de este 30 de mayo. Se elevará así, en una sola voz con el Papa, la oración a la Virgen María para pedir ayuda y socorro en la pandemia.

Cada misterio será recitado por personas que representan diversas categorías de afectados por el virus: un médico y una enfermera, en representación de todo el personal sanitario empeñado en primera línea en los hospitales; una persona curada y una que ha perdido un familiar, por todos aquellos que hayan sido tocados personalmente por el coronavirus; un sacerdote, un capellán hospitalario y una religiosa enfermera, por todos los sacerdotes y personas consagradas cercanas a los que padecen la enfermedad; un farmacéutico y un periodista, en representación de todos aquellos que, incluso durante el período de la pandemia, siguieron prestando su servicio en nombre de los demás; un voluntario de la Protección Civil con su familia, por quienes trabajaron para hacer frente a esta emergencia y por todo el vasto mundo del voluntariado; y una familia joven, que tuvieron un niño durante estos días, signo de esperanza y de la victoria de la vida sobre la muerte.

Entre los santuarios que estarán conectados se cuentan el de Czestochowa, en Polonia, Chiquinquirá, en Colombia, Elele, en Nigeria, Guadalupe, en México, Lourdes, en Francia, Luján y Milagro, en Argentina, Notre-Dame de la Paix, en Costa de Marfil, San Giovanni Rotondo y Pompeya, en Italia, o el de la Inmaculada Concepción de Washington.

 

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