Un musical sobre la conversión de Ignacio de Loyola

Un musical sobre la conversión de Ignacio de Loyola

  • On 27 de enero de 2021

OMPRESS-MADRID (27-01-21) En mayo comenzará un año ignaciano, Ignatius500, para conmemorar la conversión de San Ignacio de Loyola y, por lo tanto, los 500 años del nacimiento de la espiritualidad ignaciana. Una de las iniciativas de esta conmemoración será un musical sobre esta conversión.

Hace año y medio que Óscar Santos, conocido en el ámbito jesuita por ser el promotor de Mundosí – https://mundosi.com – plataforma que apuesta por la música y la cultura como vehículo de transmisión de los valores e identidad de la espiritualidad ignaciana, trabaja en este proyecto. Según explican desde la Compañía de Jesús, aunque no esté decidido, la idea es que este musical se llame “Conversión”, dado que su guion se centra precisamente en la conversión de Ignacio.

Fundador de la Compañía de Jesús, Íñigo de Loyola, hombre de armas, cayó herido en 1521, en la batalla de Pamplona, defendiendo la ciudad contra un ejército francés. Tenía 30 años y este hecho cambiaría su existencia. Su larga convalecencia le llevó a leer vidas de santos y a orientar su vida hacia Dios. Esta conversión es el tema del musical y, lógicamente, la esencia de este año ignaciano, que comienza precisamente al conmemorarse los 500 años de aquella herida, el 20 de mayo de 2021, y finalizará el 31 de julio de 2022, festividad de San Ignacio.

Por eso, cuentan desde Mundosí, el musical abarcará desde la batalla de Pamplona, el momento de la herida, los procesos internos de sufrimiento y cambio de planes. “Es muy del proceso interno pero al mismo tiempo el Ignacio beligerante, el cabezota… Y cómo se trasforma: su momento de conversión”, señala Óscar Santos. El guion de la obra narra un tramo de la vida de Ignacio, sin contar toda la historia. Porque se trata de centrarse en el proceso interno y contextualizar cómo se fragua la esencia de la espiritualidad, desde el momento de la herida hasta el momento en que empieza a peregrinar, haciendo mención a la redacción de los Ejercicios Espirituales, si bien no se centra en este aspecto. “Tiene un final muy abierto y con un guiño al personaje de Javier y una acción de gracias que igual podría incluir la participación de niños de colegios jesuitas”…y… hasta aquí podemos contar para que el público se sorprenda, concluye Óscar Santos.

 

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