OMPRESS-COREA (14-12-22) Fue en 1996 cuanto tuvo lugar la primera reunión de obispos de los dos países. Dada la turbulenta historia de Corea y Japón, el gesto de los obispos de ambas naciones quería contribuir a acercar a ambos pueblos, precisamente a través de la caridad y el diálogo propios de la tradición cristiana.

Fue el 16 de febrero de 1996, cuando tres obispos coreanos y dos obispos japoneses impartieron una serie de conferencias sobre el tema de los libros de texto, y la oportunidad para que, a través de ellos, se desarrollara una conciencia histórica común, que permitiera más cooperación y una comprensión que no dejara de lado la verdad. Del tema de los libros de texto de historia, se pasó al intercambio de información pastoral entre ambos países y el apoyo a intercambios en diversos ámbitos. Así comenzó este camino de unidad que dura ya 25 años, que ha llegado a influir también en el mundo académico coreano y japonés.

El pasado noviembre ambas conferencias episcopales presentaban una publicación que conmemora estos 25 años, los intercambios bilaterales y sus frutos año tras año, además de las declaraciones conjuntas y las actuaciones llevadas a cabo con la vista puesta en la reconciliación de ambos países. Destacan además los cinco mensajes conjuntos de ambas conferencias episcopales que siempre han tenido la solidaridad y la cooperación como ejes. Mensajes de solidaridad como el primero, que mostraba el apoyo de las Iglesias coreana y japonesa a la Iglesia católica en Timor-Leste, en el proceso de independencia, o el último, en 2017, una llamamiento a la paz en el noreste de Asia.