OMPRESS-BURKINA FASO (25-06-20) En la Solemnidad del Corpus Christi se ordenaban diáconos 22 seminaristas a los que han apoyado en su vocación las Obras Misionales Pontificias. En un año, la ordenación sacerdotal de cada uno será en la parroquia donde nació su vocación. Los 22 se han formado en el seminario mayor San Juan Bautista de Wayalghè en Uagadugú, la capital de Burkina Faso. Este seminario con 85 alumnos ha recibido este año 36.504 euros para el sostenimiento de los 85 seminaristas que se forman en él, además de otros 15.000 euros para pintar y reparar el edificio. De alguna manera los fieles de todo el mundo, que colaboran con las Vocaciones Nativas en los territorios de misión, han estado a su lado en el día a día de cada uno de ellos.

La tradición dice que todos los futuros ordenados del país reciben el diaconado en el seminario en el que se forman, antes de ser ordenados sacerdotes en sus comunidades de origen en Burkina o en Níger – porque el seminario también tiene jóvenes seminaristas de este país–. Los nuevos diáconos estaban radiantes de alegría, constituyen una verdadera fraternidad, unidos por su vocación sacerdotal, y por los años pasados con una formación exigente a nivel intelectual y humano, y con los diferentes servicios pastorales que cada fin de semana les han ejercitado en lo que será su ministerio. En 2017, la Iglesia de Burkina celebró el jubileo de los 75 años del primer sacerdote ordenado y hoy ya son casi 1.400, con 21 obispos.

Resultó conmovedor al final de la misa de ordenación diaconal escuchar los testimonios de algunos de estos jóvenes: “Al comienzo de la celebración estaba llorando; sentía una presencia en mi interior, algo increíble”, decía uno de ellos. Una alegría compartida por otros 21 jóvenes que también se ordenaron diáconos ese día, en la otra gran ciudad de Burkina, Bobo-Dioulasso.