Yudith Pereira: riesgo, solidaridad y entrega de los misioneros en Sudán del Sur
- On 22 de febrero de 2018
OMPRESS-SUDÁN (22-02-18) Las Obras Misionales Pontificias han entrevistado a la misionera Yudith Pereira, directora asociada de Solidarity with South Sudan. Mañana tendrá lugar la jornada especial de oración por la paz en la República Democrática del Congo y Sudán del Sur. Esta misionera, religiosa de la Congregación de Jesus-María, ha hablado sobre la situación y la labor de los misioneros en este último país, el más joven del mundo, en guerra desde su nacimiento, en el 2011.
Mucho antes del referéndum de independencia, los obispos locales pidieron ayuda a todas las congregaciones religiosas. Decenas de misioneros han arriesgado y arriesgan su vida para formar a los futuros profesores, enfermeros, comadronas, agricultores y sacerdotes del país, a través de iniciativas como Solidarity with South Sudán.
Como explicaba Yudith en la entrevista, “dada la magnitud de la tarea, las congregaciones se dieron cuenta de que no podían asumir los proyectos por separado, pero sí podían mandar a algún misionero especialista. Decidieron ir juntos, en comunidades intercongregacionales mixtas. En 2008 se formaron 5 comunidades a la vez. Se montaron dos escuelas de magisterio, una escuela de enfermería y comadrona, un proyecto agrícola, una comunidad pastoral y logística en Yuba para asistir a la Conferencia Episcopal en lo que fuera”.
La religiosa cuenta que “la gente está traumatizada”, porque “lo malo no es la pobreza material, es que la gente ha visto matar tanto, está tan destrozada por dentro, que la vida se ve con otro cristal. Es necesario recuperar a la gente, mantener esperanza, ayudarles a que hagan su proceso, que nosotros no podemos hacer por ellos”.
“Por nuestros proyectos han pasado miles de alumnos”, explica Yudith. “Aparte de magisterio, tenemos programas para reforzar la formación de los maestros que ya ejercen. Nos vamos a poblados tres meses, traemos religiosos que vienen a Sudán del Sur para esto, y montamos un programa que dura cuatro años, en tres meses en cada año. Hemos ido a sitios dificilísimos. Es peligroso, pero si no, no llegas a la gente que quiere formación. Es un proyecto precioso”.
La entrevista completa en: https://omp.es/7219-2/