Un seminario, esperanza para una de las diócesis más pobres de la India
- On 11 de abril de 2025
OMPRESS-INDIA (11-04-25) “Les damos las gracias a todos los católicos españoles, que han donado y han hecho posible la generosidad de las Obras Misionales Pontificias con este pobre seminario”, escribe Mons. Rayarala Kumar, obispo de Srikakulam, una diócesis muy pobre en la costa oriental de la India. Desde España se le han hecho llegar 3.000 dólares que junto a otras cantidades enviadas desde otros países le han permitido al Seminario de Santa Teresa del Niño Jesús de esta diócesis afrontar los gastos ordinarios de su medio centenar de seminaristas. Esta suma es el fruto de la generosidad de muchos católicos que aportaron su donativo en abril del año pasado con las vocaciones en los países de misión. La campaña de Vocaciones Nativas, organizada por la Obra de San Pedro Apóstol, una de las cuatro Obras Misionales Pontificias, la que se vuelca en las vocaciones en los territorios de misión, hizo llegar estos donativos lo más pronto posible a su destino.
Todo lo recaudado en el mundo por esta Obra de San Pedro Apóstol se pone en común y, como los primeros cristianos, de este fondo de todos se ayuda a las vocaciones y seminarios más necesitados. Un fondo que se alimenta también de la generosidad de los pobres. La Iglesia de Kenia, por ejemplo, aporta unos meritorios 50.000 dólares para vocaciones y la misma India nada menos que 275.000 dólares. Los cientos de seminarios de los 1.131 territorios de misión a los que hay que ayudar reciben el dinero desde diversos países dejando clara la universalidad tanto en el origen como en el destino de estos donativos. Las Obras Misionales Pontificias de España han tenido así el privilegio este pasado año de ayudar al seminario de Srikakulam haciendo visible la unidad y la catolicidad de la Iglesia.
La diócesis de Srikakulam se creó en 1993. Con una extensión similar a la Comunidad Valenciana. Contaba entonces con menos de 30.000 católicos. Hoy ya son 75.000, divididos en 39 parroquias. Como explica su obispo, Mons. Kumar, la población de esta zona de la India es muy pobre. Normalmente cada familia cuenta con unos dos mil metros de terreno de cultivo. Como los ingresos que producen estos campos no son suficientes se trabaja en los grandes campos de empresas y agricultores ricos. En la mayoría de las familias se puede ver a los hijos que también van a trabajar para lograr ingresos para sus hogares. Esto tiene como consecuencia la falta de estudios y la extensión del analfabetismo. Es este uno de los campos en los que las parroquias y pequeñas misiones intentan marcar la diferencia dando oportunidad a que los niños se eduquen incluso en las áreas más remotas. Es en estas pequeñas escuelas y aulas donde los jóvenes escuchan la llamada de Dios que les lleva al seminario.
Los 46 seminaristas actuales llevan una vida de trabajo, estudio y oración para prepararse a su futuro ministerio. Además de las materias propias de su carrera eclesiástica tienen que aprender los idiomas locales, sobre todo el telugu, idioma oficial en esta zona de la India y que cuenta con 83 millones de hablantes, y el oriya, que lo hablan 34 millones. Serán enviados como sacerdotes a zonas tribales, como las de los Savaras, Jatapus, Gadabas y Konas, en donde el idioma y el respeto por su cultura marcarán la diferencia entre la aceptación y el rechazo de la fe.
El seminario abrió sus puertas en 2020. Fue uno de los primeros objetivos de Mons. Kumar, que había sido nombrado obispo de la diócesis un año antes. Hasta ese momento los seminaristas eran enviados a otras diócesis de la India. El objetivo de la apertura del Seminario de Santa Teresa del Niño Jesús fue afrontar dos carencias: la adaptación a trabajar con los grupos tribales y la necesidad de dedicar algunos días al mes a labores pastorales en los lugares donde los seminaristas pasarán su vida sacerdotal, tanto en las parroquias urbanas de la ciudad Srikakulam como en las comunidades cristianas de aldeas alejadas.