Un seminario en honor de uno de los grandes misioneros de Ghana
- On 29 de marzo de 2023
OMPRESS-GHANA (29-03-23) El seminario menor de San Huberto en la archidiócesis de Kumasi es uno de los más grandes de África. Cuenta con 179 seminaristas, chicos que están discerniendo si Dios los llama al sacerdocio o a otra vocación dentro de la Iglesia familia de Dios, en esta expresión tan querida para los católicos africanos.
La Obra Pontificia de San Pedro Apóstol, la mayor institución de la Iglesia de apoyo a las vocaciones en las Iglesias jóvenes, ha acompañado a este seminario que lleva el nombre de uno de los más grandes misioneros de Ghana, el misionero holandés de la Sociedad de Misiones Africanas, el padre Hubert Paulissen. Un misionero que acabaría siendo el primer obispo de la diócesis de Kumasi cuando esta se creó en 1932. El seminario de San Huberto, que le recuerda, cuando se abrió el 30 de septiembre de 1970, quería ser también el origen de un centro educativo al que pudieran llevar sus hijos las familias católicas, pero esto no se lograría hasta 1995.
Hoy el seminario cuenta con 179 seminaristas en formación provenientes de otras diócesis de Ghana, además de la de Kumasi: Obuasi, Konongo-Mampong, Sunyani, Goaso y Wa. Hay 50 en el primer año, 60 en segundo, 58 en tercero y 11 en lo que sería ya el año propedéutico, antes de entrar al seminario mayor. Estos últimos, junto a su curso correspondiente de educación básica, estudian Introducción a la Biblia, Latín, Música, Espiritualidad y Doctrina de la Iglesia. Los seminaristas no provienen todos de hogares católicos. En algunos casos su hogar es “mixto”, con alguno de sus padres musulmán o de una religión tradicional. Incluso hay casos en los que ninguno de los padres es católico, pero se sienten muy cerca de la fe católica, como explica el propio rector del seminario, el padre Henry Mensah.
La plantilla actual de sacerdotes residentes en el seminario es de tres, compuesta por el Rector, el Vicerrector, el Director Espiritual. También hay un sacerdote no residente, el Rev. Fr. Kirk Siabour que ayuda con la formación de nuestros seminaristas. También cuentan con el apoyo de algunos laicos, que colaboran con el seminario, con el inglés o la música.
En el seminario de San Huberto suelen adoptar cada año un tema que guía la formación espiritual. El del último curso ha sido “La llamada a la santidad”, y sobre él han girado los retiros, conferencias espirituales y formación de los seminaristas. A esto ayudó una celebración especial con los sacerdotes del grupo que entró en el seminario en 1975, que animó mucho a los jóvenes seminaristas.
Como explica el rector, el padre Mensah, el seminario tiene su propia misión en la Iglesias que es otra que “velar por la formación del corazón y la mente de los seminaristas”, insistiendo también en virtudes humanas que les ayudarán a lo largo de su vida, como son la sinceridad, la fidelidad y la perseverancia”. Es una formación que ayudará también a aquellos que no se conviertan en sacerdotes porque, como ha ocurrido en todos estos años, contribuirán al desarrollo de la Iglesia y de la sociedad de Ghana.