Situación en el Congo: La guerra es siempre una derrota
- On 30 de enero de 2025
OMPRESS-REPÚBLICA DEMOCRÁTICA DEL CONGO (30-01-25) El Papa Francisco manifestaba ayer su preocupación y dolor por el grave deterioro “de la situación de seguridad en la República Democrática del Congo”, pidiendo la intervención de la comunidad internacional para frenar la violencia. “Es un desastre”, así describe un misionero la situación.
Insto a todas las partes en el conflicto”, decía el Papa al final de la Audiencia de ayer miércoles, “a que se comprometan a cesar las hostilidades y a proteger a la población civil de Goma y otras zonas afectadas por operaciones militares”. Ante los peregrinos reunidos en el Aula Pablo VI el Papa afirmó también que sigue “con preocupación lo que ocurre en la capital, Kinshasa, esperando que cesen lo antes posible todas las formas de violencia contra las personas y sus bienes. Mientras rezo por el pronto restablecimiento de la paz y la seguridad, invito a las autoridades locales y a la comunidad internacional a hacer todos los esfuerzos posibles para resolver la situación de conflicto por medios pacíficos”.
Hace tres días, el misionero javeriano Gianni Magnaguagno informaba desde Uvira, a unos 150 kilómetros al sur de Goma, sobre la caída de esta ciudad en manos de las milicias del M23 y la describía como un verdadero desastre. Según las Naciones Unidas, más de 3.500 soldados ruandeses participaron en la ofensiva, que culminó el pasado domingo con la toma de la capital de la provincia de Kivu del Norte. La ocupación era esperada desde hacía días, tras un asedio implacable que dejó a las fuerzas gubernamentales cada vez más debilitadas. En declaraciones a “Popoli e Missione”, la revista de las Obras Misionales Pontificias de Italia, el padre Magnaguagno explicaba también hace tres días que “la ciudad está completamente bajo su control y hoy ha habido saqueos desenfrenados”. Se vivieron escenas de pánico y desesperación, mientras los residentes buscaban refugio en sus casas. Aquellos que pudieron, huyeron. Algunos soldados congoleños, según el misionero, abandonaron la ciudad en barco con destino a Bukavu, mientras que otros se rindieron y buscaron refugio en la base de la ONU Monusco. Como en todo conflicto, los civiles pagan el precio más alto. “Bombardearon el Hospital de la Charité, el principal hospital diocesano de Goma”, informa el padre Magnaguagno.
Don Giovanni Piumatti, misionero Fidei Donum, con amplia experiencia en Kivu, informaba también a “Popoli e Missione” que no ha dejado de recibir mensajes, vídeos y actualizaciones desde la zona de guerra. “La gente está encerrada en sus casas, al menos los que tienen una. Nadie sabe ni entiende qué está pasando afuera”, explica. La incertidumbre prevalece, mientras el miedo y el caos aumentan con cada hora que pasa.
Kivu del Norte es una de las provincias más ricas en minerales de la República Democrática del Congo. Oro, rubíes, cobre, coltán y cobalto constituyen un tesoro subterráneo incalculable, lo que convierte a la región en un objetivo estratégico para numerosos grupos armados. Mientras la población de Goma vive aterrorizada, crecen los llamamientos a la comunidad internacional para una intervención inmediata. Se vive una situación que reafirma las palabras del Papa Francisco al terminar la audiencia de ayer: “¡La guerra siempre es una derrota! Recemos por la paz”.