Preparando la campaña de apoyo a las vocaciones en los territorios de misión
- On 29 de marzo de 2022
OMPRESS-ALCALÁ (29-03-22) La Delegación de Misiones de Alcalá ha comenzado la ronda de visitas a los arciprestazgos de la diócesis para concienciar a los sacerdotes y sus comunidades sobre la campaña de San Pedro Apóstol, la Obra Pontificia que impulsa las vocaciones nativas de los territorios de misión. El primer encuentro tuvo lugar en Torrejón de Ardoz y, en las próximas semanas, seguirán el resto de los arciprestazgos, con la dinámica de ofrecer información sobre las vocaciones y sobre la generosidad de los alcalaínos con el mundo misionero.
Es la oportunidad para que conozcan los materiales de la campaña del próximo 8 de mayo, día en que se celebrará la Jornada de Vocaciones Nativas y la Jornada Mundial de Oración por las Vocaciones, que llevan como lema conjunto “Deja tu huella, sé testigo”. El lema se inspira en las palabras del Papa Francisco a los jóvenes en la JMJ de Cracovia, en 2016: “Jesús te llama a dejar tu huella en la vida, una huella que marque tu historia y la historia de tantos”. En cuanto al cartel, muestra las piernas de un caminante descalzo que atraviesa el agua, cuyas gotas, al salpicar, se transforman en cruces de diversos colores, haciendo referencia a la diversidad de llamadas y carismas y la variedad de respuestas a la hora de ser testigo.
También se muestra, en estos encuentros en los arciprestazgos, cómo ayudan las Obras Misionales Pontificias a los territorios de misión y cómo lo suyo “no son los pozos”, sino la evangelización, la misión. Como señalan desde la Delegación de Misiones de Alcalá, se trata de “no tener miedo a explicar en qué consiste invertir en evangelización”. Se explicó además cómo el sistema de ayudas y reparto del dinero, proveniente de la generosidad con las misiones de tantos fieles católicos, se hace desde un Fondo común, que literalmente se divide entre todos. Así el aumento o descenso en la generosidad con las misiones por parte de la familia de Dios afecta a todas y cada una de las jóvenes Iglesias de misión, para bien o para mal, porque todos, aquí y allí, estamos en la misma barca, que es la Iglesia.