Pascua del Enfermo y Unión de Enfermos Misioneros
- On 12 de mayo de 2023
OMPRESS-MADRID (12-05-23) Este domingo 14 de mayo, IV Domingo de Pascua, se celebra la Pascua del Enfermo, una celebración que va unida a la Jornada Mundial del Enfermo del 11 de febrero, día de la Virgen de Lourdes, y que busca que nuestros enfermos y mayores sientan la cercanía, el cuidado, oponiéndose a los que llama el Papa Francisco la “cultura del descarte”.
En este sentido, los obispos españoles piden fomentar la “mirada”, que nos permita “descubrir el valor de la vejez y promover una actitud de estima hacia los mayores”, que nos haga “más sensibles ante los particulares retos que se les presentan: la soledad no deseada ni buscada, la merma de sus facultades, la dependencia respecto de los demás, etc.”. Los enfermos y mayores no son solo objeto de cuidados o de actividad pastoral, apuntan desde la Conferencia Episcopal Española son “miembros activos, imprescindibles, en la tarea de evangelización, que pueden tener un papel educativo esencial en la transmisión de la fe, en la memoria de las raíces, en el testimonio de la oración”.
Es esta línea apuntada para esta Pascua del Enfermo la que impulsa la Unión de Enfermos Misioneros. Se trata de una unión, acogida por las Obras Misionales Pontificias y su labor de animación misionera, de oración y ofrecimiento que acoge a aquellos fieles que, experimentando la enfermedad, quieren ofrecer su sufrimiento por la misión de la Iglesia de llevar el mensaje de Jesús al mundo y por los misioneros. Los enfermos se unen a través de una sencilla publicación, el Tríptico de Enfermos Misioneros. Esta Unión nació en 1928, fruto del espíritu misionero de Margarita Godet, una mujer laica que quería ser misionera pero estaba inmovilizada por la enfermedad. Se ofreció entonces como “enferma misionera” al seminario de Misiones Extranjeras de París, una institución que enviaba gran número de misioneros a diversos lugares del mundo. La Unión de Enfermos Misioneros llegó a España en 1940 por obra del sacerdote de Pamplona Ignacio Villanueva. En 1945 es acogida en la Pontificia Unión Misional, una de las cuatro Obras Misionales Pontificias, precisamente porque coincide con el carisma específico de esta Obra, formar a los fieles cristianos en su responsabilidad con la misión universal, en este caso a los fieles cristianos enfermos y mayores.
En su mensaje para la Jornada Mundial del Enfermo de este año, el Papa Francisco animaba a que toda la Iglesia se convirtiese en un auténtico “hospital de campaña”. “Su misión”, añadía, “sobre todo en las circunstancias históricas que atravesamos, se expresa, de hecho, en el ejercicio del cuidado. Todos somos frágiles y vulnerables; todos necesitamos esa atención compasiva, que sabe detenerse, acercarse, curar y levantar. La situación de los enfermos es, por tanto, una llamada que interrumpe la indiferencia y frena el paso de quienes avanzan como si no tuvieran hermanas y hermanos”.
En las diócesis españolas esta Pascua del Enfermo se celebrará con diversos actos y, sobre todo, como una oportunidad privilegiada y especial de vivir el mensaje de alegría de la Resurrección del Señor. Se trata de unirse a todos los enfermos y mayores en la cercanía y en la plegaria: “Tú, Señor, que siempre estás con nosotros, dame la alegría de la fe hasta que ‘mis ojos vean tu salvación’. Amén”.