Los misioneros en Japón y su palabra de vida a los “hikikomori”
- On 28 de septiembre de 2018
OMPRESS-JAPÓN (28-09-18) Misioneros por el Mundo nos lleva el sábado 29 de septiembre hasta Osaka, la segunda ciudad más grande de Japón. Allí, los misioneros españoles cuidan a la pequeña comunidad de fieles de la Iglesia Católica (sólo un 0.4 %), ofreciendo asistencia espiritual y social a una población que lo tiene todo, pero que sufre, sobre todo entre sus jóvenes un fenómeno de aislamiento y dificultad para comunicarse que los japoneses han bautizado como “hikikomori”.
En la Iglesia de la Sagrada Familia, de Osaka, se encuentra el misionero Miguel Ángel Aragón Moreno, sacerdote diocesano de Cuenca, y perteneciente al Instituto de Misiones Extranjeras (IEME). Unas 26 personas están en este momento en el grupo de Introducción al Cristianismo que ofrece la parroquia, para poder bautizarse en Pascua. El año pasado, hubo más de 50 bautizos, aunque hacerse cristiano no es una decisión fácil; como dice el misionero, eso implica para muchos cristianos romper con su familia. Miguel Ángel afirma que para los problemas de los japoneses, como el suicidio, el “hikikomori”, o la soledad, son importantes los valores del Evangelio y la presencia de los misioneros. Otra de las dimensiones que el misionero cultiva en Japón, es el diálogo interreligioso “de oración y de a pie de calle”.
El claretiano Félix Martínez San Martín, nacido en Aranda de Duero (Burgos), lleva 36 años en Japón. En Hirakata (una especie de “ciudad dormitorio” de Osaka), atiende la iglesia de la Virgen de Guadalupe, la única para una ciudad de cerca de 450.000 habitantes (unos 1.600 católicos). Este templo se construyó recién terminada la Guerra Mundial, con donativos de los mexicanos (por eso su advocación es la de Guadalupe). A ella pertenecen los parvularios católicos que atiende el padre Félix, donde los niños japoneses aprenden a rezar.
Otro claretiano, el misionero Josep María Abella, nacido en Lleida, fue el superior general de esta Congregación entre 2003 y 2015. Cuando el misionero recibió a Misioneros por el Mundo, el Papa Francisco no le había nombrado todavía obispo auxiliar de Osaka (fue consagrado el 16 de julio en la Catedral de esta diócesis). Abella afirma que sólo a partir de la vivencia personal de la fe, de contar la propia experiencia, se puede abrir el camino al Evangelio entre los no creyentes. En el Centro Pastoral Social de la diócesis de Osaka, la Iglesia Católica trabaja por los derechos humanos y la justicia social, y ofrece ayuda a refugiados, inmigrantes, indocumentados, y también a un grupo de japoneses poco conocidos, los “Buraku”, que son los marginados de Japón. En esta “realidad eclesial pequeña pero significativa”, el hoy obispo auxiliar de Osaka, afirma que el único poder de la Iglesia en Japón es “el poder de la transparencia, de la sinceridad y de la conexión entre lo que dice y lo que hace”.
Misioneros por el Mundo se emite los sábados a las 11,40 (después de la Misa). Los programas pueden verse en redifusión los martes a la misma hora; seguir en directo on line en: http://trecetv.es/directo; y tras su emisión, verse en la web del programa: http://trecetv.es/programas/misioneros-por-el-mundo