Los barcos hospitales del Amazonas con nombres de Papas

OMPRESS-BRASIL (10-12-24) Tras tres años de trabajos para adaptar un antiguo barco de pasajeros en un buque sanitario, el barco hospital “San Juan XXIII” entró en servicio este pasado sábado 7 de diciembre para brindar atención sanitaria a comunidades ribereñas del estado de Amazonas, en Brasil. Este es el tercer barco de una flota de barcos hospitales dirigida por la Associação e Fraternidade São Francisco de Assis na Providência de Deus, una congregación que gestiona decenas de hospitales y clínicas en todo Brasil.

El primer barco hospital, el “Papa Francisco”, comenzó su andadura por el Amazonas en 2019. A este siguió, el año siguiente, el “San Juan Pablo II”. Fue el mismo Papa Francisco quien inspiró este proyecto de hospitales móviles. Durante la Jornada Mundial de la Juventud de 2013, en su visita al Hospital de Río de Janeiro administrado por la Fraternidade São Francisco de Assis, el Papa preguntó a Fray Francisco Belotti, el fundador de la fraternidad, si estaban presentes en la Amazonia. Les animó a que pusieran en marcha un proyecto en la región. Estos barcos fueron la respuesta a este deseo.

Estas tres embarcaciones están dirigidas a quienes viven en las riberas de los diferentes ríos de la Amazonía y no tienen acceso a atención médica. Cada uno de los tres barcos cuenta con dos botes ambulancia que funcionan como unidades móviles y permiten el transporte de personas a lo largo de pequeños ríos y canales. Los barcos hospitales contribuyeron de manera importante a la superación del Covid-19 en la región amazónica, gravemente afectada por la enfermedad.

Desde ellos los médicos realizan partos y operan desde hernias hasta cataratas. Incluso cuentan con consultas psiquiátricas. En total se han realizado más de 5.000 exámenes y más de medio millón de consultas. Muchas personas que nunca se habían hecho ningún tipo de examen, que nunca habían ido al dentista, han tenido la primera oportunidad de hacerlo.

Todos los médicos y dentistas que trabajan temporalmente en los barcos son voluntarios. Francisco Belotti explicaba al portal Cruxnow que nunca faltan profesionales. “Si un médico me pide sumarse hoy, tendré que decirle que solo será posible el año que viene. Hay una cola de profesionales esperando para colaborar”.