Esperanza en la situación sanitaria de los niños en Tucupita
- On 22 de abril de 2024
OMPRESS-VENEZUELA (22-04-24) El pasado miércoles llegaba a Nabasanuka y Tucupita un barco hospital para afrontar la situación que se está viviendo en el Estado Delta Amacuro. Más de una decena de niños han fallecido por una enfermedad desconocida que afecta sobre todo a los más pequeños.
El misionero de la Consolata Andrés García informaba hace unos días de esta situación que afectaba sobre todo a las comunidades de Sakoinoko, Mukoboina y Yorinanoko, en la zona del delta del río Orinoco, habitada por la etnia warao, en el estado venezolano de Delta Amacuro, fronterizo con la Guayana. Desde el Vicariato Apostólico de Tucupita, el mismo misionero informa ahora de la alegría de que las autoridades hayan respondido con presteza ante esta extraña enfermedad.
“Queridos hermanos”, dice el padre Andrés, “os comparto con alegría que me han informado de la llegada de la barcaza (barco hospital) a Nabasanuka en el día de ayer, y que también ayer llegó a la ciudad de Tucupita, capital del Estado Delta Amacuro (de nuestra región), una comisión formada por el vice ministro de sanidad y por algunos médicos epidemiólogos con el fin de hacer un diagnóstico y frenar esta epidemia. Agradecidos a cuantos están visibilizando la situación y a las autoridades civiles y sanitarias que se están activando para defender la vida de nuestro pueblo. Es un gran paso, pero seguimos contra-reloj, porque la enfermedad sigue haciendo víctimas y muy rápidamente. Con nuestro agradecimiento, acogida, colaboración y oración, hagamos todo lo posible para que los esfuerzos den rápidamente el fruto esperado. ¡Bendito sea Dios!”.
Por otro lado la gobernadora del Estado Delta Amacuro, Lizeta Hernández, informaba a los medios locales que todavía no se ha identificado la enfermedad y que las muestras habían dado negativo a tuberculosis, chikungunya, dengue, paludismo, meningitis y neumococo. Estas enfermedades eran las más probables ante el cuadro médico que presentaban los afectados: fiebre, dolor de cabeza, dolor de cuello y convulsiones. La buena noticia es que hasta el sábado se contaban ya cinco días sin fallecimientos.