El Rosario Misionero que toca los corazones
- On 6 de octubre de 2025
OMPRESS-ALCALÁ (6-10-25) Este sábado 4 de octubre, a las 8:30h de la noche, el Rosario Misionero de Antorchas recorría las calles de Alcalá, con un recorrido encabezado por el obispo de la diócesis, Mons. Antonio Prieto. La imagen de la Virgen de Fátima, propiedad de las Carmelitas de la Imagen, pasó recorriendo las calles del centro de la localidad. En su décima edición este Rosario Misionero de Antorchas ha tocado muchos corazones y derramando abundantes bendiciones. “Estamos convencidos –afirma la hermana Beatriz Liaño, secretaria de la Delegación de Misiones– que este Rosario tiene los frutos que tiene porque el Señor no puede hacer otra cosa sino bendecir cuando ve a sus hijos trabajando juntos para su gloria”.
En efecto, el Rosario Misionero de Antorchas, promovido desde la Delegación de Misiones, coordina el trabajo de los voluntarios de la Delegación con la importante ayuda de la Hermandad Columna y Lágrimas –que colabora con el orden del cortejo– y de la Escuela Diocesana de Evangelización. La presencia de la Escuela hace que este Rosario sea doblemente misionero: primero, porque se reza por los misioneros y, además, por el anuncio de la Buena Noticia entre las personas que encuentran en el recorrido. Reúne además a muy diversas comunidades misioneras presentes en nuestra diócesis y que dan un importante testimonio de unidad, más allá de la sensibilidad de cada una.
La secretaria de la Delegación continúa explicando: “Son tantas las historias que se entretejen al paso de la procesión… Por ejemplo, me contaron que una mujer exclamó al ver la imagen de la Virgen: ‘Cuánto tiempo hace que no rezo… Tengo que volver a rezar’. Solo por ella, merecía la pena todo el esfuerzo organizativo. Pero no fue la única. Una de las evangelizadoras contaba que vio a una señora que estaba cenando en una terraza. Al pasar la Virgen, se levantó profundamente emocionada y echó a correr detrás de la procesión. La evangelizadora se le acercó y ella, abrazándola, lloraba mientras decía: ‘Como yo no me acerco a Ella, Ella ha venido a mí’”.
Este año el Rosario tenía una intención añadida: se unía a la llamada que el Papa León XIV hizo a toda la Iglesia en la Audiencia general del 24 de septiembre de 2025, cuando pidió “rezar el Rosario por la paz, personalmente, en familia y en comunidad”, cada día de este mes de octubre.