Arrestados en Bielorrusia dos misioneros Oblatos
- On 16 de mayo de 2024
OMPRESS-BIELORRUSIA (16-05-24) “Estamos profundamente preocupados por la noticia del encarcelamiento de dos de nuestros hermanos en Bielorrusia”, manifestaba el padre Luis Ignacio Rois, superior general de los Misioneros Oblatos de María Inmaculada, tras la detención de los padres Andrzej Yuchnevich y Pavel Lemekh, que trabajan en la diócesis bielorrusa de Vitebsk. Los dos misioneros sirven en el santuario diocesano de Nuestra Señora de Fátima en Šumilin. El pasado 8 de mayo fueron arrestados por la policía bielorrusa. El primero, el padre Yuchnevich, superior de la Misión Oblata en Bielorrusia, había expresado públicamente su solidaridad con el pueblo ucraniano, al inicio de la invasión de Ucrania por parte de la Federación Rusa, instando a orar por el fin de la guerra. Además es el presidente de la Federación de Religiosos y Consagradados de Bielorrusia desde mayo de 2022.
El caso de estos dos misioneros oblatos no es el único. Según datos de “Christian Vision”, que supervisa la libertad religiosa y de culto en Bielorrusia, hasta el 11 de octubre de 2023, al menos 60 sacerdotes habían sufrido “persecución política”. Un asunto que llegó hasta el Parlamento Europeo con una propuesta de resolución presentada por la Comisión de Asuntos Exteriores el año pasado, el 31 de julio de 2023. En el texto, cuyo ponente fue el parlamentario lituano Petras Auštrevičius, se pedía al Parlamento Europeo que condenara firmemente “la persecución de las comunidades religiosas en Bielorrusia, así como la persecución de los sacerdotes y laicos que, en el desempeño de sus actividades, se niegan a apoyar la posición del régimen de Lukashenko y expresan desacuerdo con sus políticas”. La resolución incluía los casos de la condena del sacerdote ortodoxo Siarhei Rezanovich, su esposa y su hijo a 16 años de prisión, la presión sobre el arzobispo ortodoxo Artemy Kishchanka, ya fallecido, así como las detenciones periódicas de sacerdotes, incluido el arresto en mayo de 2023 de los sacerdotes católicos Viachaslau Adamovich, Andrei Kulik y Aliaksandr Shautsou y del catequista Uladzislau Beladzied”. Bruselas también condenó enérgicamente la confiscación de iglesias a los católicos en Minsk y la prohibición de cualquier actividad política en el marco de la evangelización protestante. También está el caso del padre Henrykh Akalatovich, sacerdote de 70 años de Valozhyn, detenido en noviembre de 2023, acusado de “alta traición”.