A pocas semanas de la visita del Papa a Sudán del Sur
- On 20 de mayo de 2022
OMPRESS-SUDÁN DEL SUR (20-05-22) El Papa visitará Sudán del Sur del 5 al 7 de julio. Era un sueño que abrigaba desde hacía tiempo, pero que por motivos de seguridad, debido al conflicto civil y étnico que sufría el país ha sido pospuesto desde 2016. El obispo de Rumbek, Christian Carlassare, el misionero comboniano que sufrió un atentado en 2021, afirma que lo acogerán con los brazos abiertos. Este viaje apostólico le llevará antes a la República Democrática del Congo, donde visitará Kinshasa y Goma, para después llegar a Juba, en Sudán del Sur. Tanto el Pontífice como el primado anglicano Justin Welby se han implicado asiduamente para que se hagan realidad los acuerdos de paz que en su momento se adoptaron. Mensajes conjuntos y sobre todo un “retiro espiritual” ecuménico, que reunió a los líderes cristianos del país en abril de 2019. Fue conmovedora la imagen del Papa poniéndose de rodilla para besar los pies de los líderes del Sudán del sur, implorándoles la paz.
En una entrevista concedida a SIR, la agencia de noticias de la Conferencia Episcopal Italiana. Mons. Christian Carlassare, obispo comboniano de Rumbek en Sudán del Sur que el año pasado fue víctima de un grave atentado en la noche del 25 al 26 de abril, explicaba que irá a Juba, a ver al Papa, a pie con un centenar de jóvenes de su diócesis. Caminará con ellos 40 kilómetros diarios durante 8 días, con catequesis y momentos de reflexión sobre la reconciliación y la unidad, entre el agua y el barro de la temporada de lluvias y la inseguridad de los caminos internos, muchas veces objeto de ataques de las milicias. “La única duda es sobre la fuerza de mis piernas, pero creo que puedo hacerlo. Sin embargo, nos acompañarán algunos coches. Es importante que los jóvenes entiendan el viaje como una marcha por la paz al encuentro del Papa. Le pediremos al Gobierno que preste especial atención a la seguridad y haremos un llamamiento a las milicias para que no haya enfrentamientos”. Este es el clima que reina a pocas semanas de la visita del Papa Francisco a Sudán del Sur. Para el Papa será un viaje a zonas de conflicto también con problemas para caminar, por lo que irá en silla de ruedas. Una situación casi simbólica que se puede equiparar al cansancio de la población, tras años de violencia y casi desilusionada con la posibilidad de alcanzar finalmente la paz y la unidad.
“Esperamos que la visita del Papa ayude a relanzar el proceso de paz y nos dé esa unidad y reconciliación que tanto necesitamos”, explica el misionero, que añade que “la mitad de la población tiene menos de 24 años, los jóvenes están desanimados porque no tienen trabajo ni oportunidades. El 60% de la población es analfabeta, un tercio del país está en edad escolar, por lo que la máxima prioridad para nosotros es la educación. Tenemos 20.000 alumnos en nuestras escuelas, tanto diocesanas como de institutos religiosos”.