Burkina FasoRosario Martínez

“FELIZ NAVIDAD A TODOS. QUE DIOS OS CONCEDA PAZ, SALUD, Y AMOR”

Rosario Martínez es misionera de María Inmaculada en Bobo-Dioulasso,  Burkina Faso. Desde allí nos felicita la Navidad y agradece el apoyo constante que reciben las misioneras en su labor de ayudar a la educación de las niñas en este país africano.

 

“En esta cita ‘obligada’ cuando la Navidad se aproxima, vengo hoy a todos vosotros para reiteraros, una vez más, en nombre de mi comunidad y en mi nombre propio, nuestro agradecimiento y reconocimiento por vuestra generosidad sin límite y vuestro ‘saber estar desde cerca o desde lejos’ a nuestro lado.

El año escolar 2016-2017 terminó bien, junto con la celebración solemne de los 25 años de nuestra presencia en este país. Fue una fiesta muy entrañable en la que pudimos constatar cuánto bien se está haciendo, en medio de la población en general y de la juventud en particular. Muchas de las chicas, que han pasado a lo largo de los años por el Centro formativo o la residencia, se dieron cita el día 22 de mayo para hacer memoria de tanto bien.

Coronó este año el éxito de las chicas que se presentaron al examen nacional de costura (CQP) pues todas aprobaron: algo inédito. Fue el único centro de todo el país que acabó con un 100 por 100 de aprobados en un examen nacional de formación profesional.

El año 2017-2018 ha empezado con la casa a tope; este año el Ministerio de Educación ha abierto un liceo científico. En este liceo o instituto, los mejores alumnos del país al terminar lo que sería la ESO, pueden formarse durante tres años de cara a integrar después la universidad en las especialidades de ingeniería. En nuestra residencia han pedio alojar a las chicas que no son de Bobo. Son 12 chicas de 15 y 16 años, muy motivadas, que están dando un empuje a las otras de cara a los estudios. Como todas son becadas por el gobierno, a pesar de ser años difíciles, es una ayudita económica también para el centro. Dios provee en cada momento y la obra continua…

Este año hemos empezado una nueva especialidad en nuestro Centro Formativo: ‘Auxiliares de Puericultura’ o Asistentes Maternales. Son chicas con deseos de aprender, que le han echado ganas pues, a excepción de una, todas ellas habían pasado unos cuantos años sin ir a la escuela.

Al lado de todo esto, nuestras actividades habituales continúan: atención a los pobres y enfermos, acogida de los necesitados, apoyo escolar a niños y jóvenes en situaciones desfavorecidas, colaboración en todo lo que podemos en la parroquia y en nuestro barrio… y estar en medio de esta gente que tanto esperan de los misioneros, particularmente en estos años difíciles a todos los niveles. Vivir al ritmo de este pueblo, gozar y sufrir con ellos, trabajar codo con codo con ellos, luchar día a día por una sociedad más pacífica, llevando a todos la Buena Nueva del Evangelio, es nuestro objetivo.

El problema de inseguridad del país hace que se palpe más esa solidaridad práctica que brota de una vida compartida. El yihadismo sigue siendo una amenaza y, aunque el gobierno invierte en seguridad, los repetidos ataques muestran que estos individuos están bien decididos a hacer difícil la estabilidad de este país como de tantos otros.

En medio de esta realidad nos preparamos para acoger al Dios-con-nosotros que viene a unir, a enseñarnos, a perdonar, a mostrarnos el rostro del Padre, a manifestarnos una vez más que cada ser humano es único a los ojos de nuestro Dios.

Feliz Navidad a todos y buen año 2018. Que Dios os conceda todo lo que más necesitéis, particularmente Pan, Paz, Salud, Gozo y Amor”.