La Virgen del Pilar acoge “20 becas” para vocaciones en la misión

OMPRESS-ZARAGOZA (5-06-25) Ayer tenía lugar en la Santa Capilla de la Basílica de Nuestra Señora del Pilar la ofrenda de la “Corona de Becas” de Vocaciones Nativas, una tradición que se remonta a 1991 y que pone nombre –el de una advocación o un santo– a cada una de las ayudas que reciben seminaristas sin recursos en el mundo. La Eucaristía y la presentación de estas becas, que tuvieron lugar ayer a las 20:00h son una tradición que se remonta a 1991 iniciada por los sacerdotes que aquel año cumplían sus Bodas Sacerdotales y que quisieron compartir la felicidad de su vida sacerdotal financiando cada uno una beca. Durante estos 34 años, gracias a la generosidad de sacerdotes, comunidades religiosas, asociaciones donaciones particulares y herencias, en la archidiócesis de Zaragoza se han podido completar casi 1.100 Becas de Estudio para vocaciones sacerdotales y a la vida religiosa en territorios de misión.

Cada beca recibe el nombre de una advocación mariana, de una santa o santo… Este año hemos querido resaltar las advocaciones y dedicación de los templos jubilares de nuestra diócesis, santos zaragozanos y patronos de las misiones. Junto a Santa María del Pilar, está Santa María de los Sagrados Corporales de Daroca o Nuestra Señora de la Esperanza de Calanda. Y también está la beca con el nombre San Ignacio Clemente Delgado, patrono de los misioneros zaragozanos, y las becas a nombre de los dos patronos de las misiones, San Francisco Javier y Santa Teresa del Niño Jesús.

La Iglesia española celebra cada año la Jornada de Vocaciones Nativas. La impulsa la Obra de San Pedro Apóstol, una de las cuatro Obras Misionales Pontificias, la que está volcada en el apoyo a las vocaciones en la misión. Pero la promoción de estas vocaciones no se limita a la jornada. A lo largo de todo el curso se pone a disposición de los fieles la posibilidad de apoyar las vocaciones de jóvenes llamados por Dios en países como el Congo, Burundi o Sri Lanka. Sus familias y las diócesis de las que serán sacerdotes no tienen los suficientes medios para mantenerlos y, sobre todo, para darles la formación de calidad necesaria para que sean los líderes de las jóvenes comunidades cristianas que no dejan de aumentar en estos países.

Por eso la Obra de San Pedro Apóstol articula un sistema de becas que “visualiza” este apoyo y esta verdadera “inversión” en lo que más importa, pastores que administren los sacramentos, tengan la palabra de Dios en sus labios y sean ejemplo de hombres de Dios. Hay tres modalidades de becas: “beca de un curso”, para financiar el curso académico de un seminarista, de una novicia o un novicio (350 euros); “media beca”, que cubre tres años de preparación de un futuro sacerdote (1.000 euros); o una “beca completa” (2.000 euros), que financiaría los seis años de formación de un seminarista.

Para saber más y cómo colaborar: https://vocacionesnativas.es/. Y aquí para información sobre las becas.