El aprecio del nuevo Papa por los misioneros españoles
- On 9 de mayo de 2025
OMPRESS-ROMA (9-05-25) “Un saludo especial a todos ustedes y, en especial, a los misioneros españoles que entregan la vida por el evangelio en América Latina”, decía el año pasado el entonces cardenal Prevost en su mensaje para el Día de Hispanoamérica que la Iglesia española celebra todos los años por su vinculación misionera con el continente hermano. El Papa Francisco le había nombrado presidente de la Pontificia Comisión para América Latina además de Prefecto del Dicasterio para los Obispos. Como ha sido tradicional desde hace muchos años el presidente de esta comisión envía un mensaje para apoyar el Día de Hispanoamérica que reconoce especialmente la labor misionera de muchos sacerdotes diocesanos españoles en América.
En aquel mensaje de 2024 el ahora Papa León XIV comentaba el lema “Arriesgan su vida por el Evangelio” recordando a San Óscar Romero, el arzobispo mártir de San Salvador que fue un ejemplo de ese “arriesgar”, que es lo que hacen los misioneros en tantos lugares del mundo.
El pasado 2 de marzo, con motivo del Día de Hispanoamérica de este 2025, enviaba otro mensaje en que se centraba en los desafíos del continente americano. No dudaba en decir, con el conocimiento de quien ha nacido y ha vivido la misión en dos países de América, que “en todo el continente americano, existen numerosas contradicciones, miserias y absurdos. Al revisar las noticias del día, podemos sentirnos rebasados e incapaces de contribuir a que algo pueda cambiar. Sin embargo, los «signos de los tiempos» no son solamente los muchos desafíos sociales. El principal «signo de los tiempos» es el propio Jesucristo, que es preciso reconocer en el interior de las heridas y de los sufrimientos de nuestros pueblos. Jesucristo siempre suscita, de manera discreta pero eficiente, conversión, comunión, fraternidad y misión”. Un mensaje que concluía con un deseo: “¡Quiera Dios que todos los misioneros en tierras americanas encuentren, durante el año jubilar, motivos renovados para anunciar con alegría que «la esperanza no defrauda»!”.