OMPRESS-COREA (19-11-24) Las reliquias del beato Carlo Acutis acaban de llegar a la archidiócesis de Seúl. Se trata de un gesto que ayudará a la comunidad cristiana coreana a prepararse al jubileo del 2025, año en que será declarado santo, y también como un apoyo a todos los actos previos a la JMJ de Seúl 2027.

El beato Carlo Acutis fue un joven apasionado que dio testimonio de su fe a través de Internet. Murió de leucemia en 2006 y está previsto que sea canonizado este próximo año 2025. Esta entrega de las reliquias del beato Carlo Acutis fue posible gracias a los esfuerzos de la Sociedad de Misiones Extranjeras de París. El Comité Organizador Local de la JMJ de Seúl 2027 colocará posteriormente los restos en la capilla del Centro de la JMJ al que tendrán acceso todos los jóvenes. Como señaló el arzobispo de Seúl, el beato Carlo Acutis llega “como el primer joven que visita Corea en espíritu”. Se convierte así en el primer joven en llegar a Corea para la JMJ Seúl 2027.

Las reliquias, que comprenden 16 mechones de cabello de Carlo, fueron entregadas oficialmente en una ceremonia celebrada en la oficina del arzobispo de Seúl. El padre Will Conquer, de la Sociedad de Misiones Extranjeras de París, entregó las reliquias al arzobispo Peter Soon-taick Chung, junto a los documentos que certifican su autenticidad. A la entrega asistieron. además de miembros de la archidiócesis y el Secretario Ejecutivo del Comité Organizador Local de la JMJ Seúl 2027, el padre Peter Joo-yul Yang, seis jóvenes implicados en la preparación de la JMJ.

Nacido en Londres en 1991 de padres italianos, el beato Carlo Acutis destacó por su fe y el uso innovador de Internet para evangelizar. Conocido como el “influencer de Dios”, creó un sitio web que documenta milagros eucarísticos y apariciones marianas. A pesar de su prematuro fallecimiento por leucemia a la edad de 15 años, su legado continúa inspirando a los jóvenes de todo el mundo.

La llegada de las reliquias a Seúl tiene un significado importante para la comunidad católica coreana y se quiere distribuir las mismas a las diócesis de Corea del Sur durante el Jubileo de 2025, lo que permitirá que el legado espiritual del beato Carlo llegue a más fieles. Su canonización fue aprobada por el Papa Francisco en julio de 2024, y se espera que sea proclamado santo en 2025.