Homenaje al creador del Servicio Jesuita a Refugiados
- On 18 de noviembre de 2024
OMPRESS-ROMA (18-11-24) Con motivo del aniversario del padre Pedro Arrupe SJ, 14 de noviembre de 1907, que tiene un significado especial para el Servicio Jesuita a Refugiados (JRS, por sus iniciales en inglés), obra apostólica que él fundó para atender a las necesidades de los refugiados y desplazados. Curiosamente JRS se fundó también un 14 de noviembre de 1980.
El Servicio Jesuita a Refugiados ha dedicado toda su actividad a “acompañar, servir y defender”, como dice su lema, a cientos de miles de personas, haciendo realidad la visión del padre Arrupe. Ha ofrecido a innumerables refugiados una atención a todos los niveles: sanitario, educativo, religioso, social. La población con la que trabaja comprende a todos los que han sido apartados de sus hogares por los conflictos, los desastres humanitarios o las violaciones de los derechos humanos. Su actuación se ha desplegado en 50 países en todos los continentes y beneficia a casi 680.000 personas. En sus más de 40 años de historia ha estado presente en conflictos como las guerras civiles en Centroamérica, en los Grandes Lagos africanos y Oriente Medio, siempre defendiendo los derechos de los refugiados y desplazados en zonas de conflicto y áreas fronterizas desde la cercanía y el acompañamiento.
Cuando cumplió sus cuarenta años de creación el mismo Papa Francisco enviaba una carta al director internacional del JRS, en la que recordaba que “el Padre Arrupe transformó su conmoción por el sufrimiento de quienes huían de su tierra en busca de seguridad tras la guerra de Vietnam en una preocupación profundamente práctica por su bienestar físico, psicológico y espiritual. Este deseo profundamente cristiano e ignaciano de aliviar la situación de quienes se encuentran en la desesperación absoluta ha inspirado y guiado el trabajo del JRS durante los últimos cuarenta años: desde sus inicios con los vietnamitas que huían por mar a principios de la década de los 80, hasta el día de hoy, en que la pandemia del coronavirus ha dejado claro que toda la familia humana está ‘en el mismo barco’, enfrentando desafíos económicos y sociales sin precedentes”.
Una semblanza e imágenes del padre Arrupe aquí.