Presentación pregón del Domund 2024, por D. Cisco García
- On 15 de octubre de 2024
Hola, soy Cisco García y el 28 de diciembre de 2015 un accidente me cambió la vida por completo. Desde entonces voy en silla de ruedas, que es algo que acepté muy pronto y pude seguir llevando la vida que yo quería vivir, que es una vida muy activa. Eso, unido a varias cosas más que ahora no vienen al caso, sorprende a mucha gente y recibo decenas de mensajes de personas que me cuentan que tienen un problema determinado que no consiguen superar y me piden consejo de que hice yo para superar mi situación en silla de ruedas.
En muchas ocasiones estas personas se sorprenden cuando yo les digo que me apoyé en Dios y me inspiré en los misioneros. Me apoyé en Dios cuando entre otras cosas cada tarde bajaba a la capilla del Hospital Nacional de Parapléjicos a rezar y reflexionar. Esa introspección me llevó a conclusiones muy importantes que me dieron fuerza para dar el paso, pasar página y seguir mi camino en silla de ruedas.
Me inspiré en los misioneros porque en esa época donde yo aun no era independiente (me tenáin que vestir, que bañar…) trataba de buscar ejemplos de lucha y en los misioneros encontré mucha fuerza y coraje. Yo estaba en la cama del hospital días después de mi accidente, semanas después de mi accidente, y pensaba en todos esos misioneros que estaban en lugares inhóspitos, altamente peligrosos en muchos casos, que habían renunciado a toda comodidad y dedicaban su vida a ayudar a las personas más desfavorecidas del planeta. Yo pensaba, si ellos pueden hacer todo eso, yo puedo vivir en silla en Europa donde abro el grifo y sale agua potable y voy al supermercado y hay de todo.
Cuando le digo esto a la gente que me escribe, muchos lo entienden y se reconfortan, porque son católicos, pero hay otros muchos que se sorprenden porque tienen el prejuicio de que un religioso es alguien débil y poco proactivo, sin coraje. La fe es para débiles, escucho a veces. La ignorancia es muy atrevida. La fe es el verdadero motor que te permite seguir luchando. Los misioneros son, de largo, las personas más inspiradoras, superan sus propios miedos, que estoy seguro que los tienen, y se lanzan a pecho descubierto a ayudar a los demás, y lo hacen guiados por Dios, sino sería imposible aguantar lo que aguantan.
En los últimos años he conocido a mucha gente a la que admiraba, grandes estrellas mundiales del deporte, de la música. He compartido rato y conversación con personas como Rafa Nadal, con Alejandro Sanz, con Ilia Topuria… personas que han logrado cosas únicas y han llevado vidas sorprendentes. Pues bien, os aseguro que nadie me ha impresionado tanto como Monseñor Juan José Aguirre. Un hombre que nace en Córdoba y renuncia a una vida que podía haber sido confortable para dedicarse al sacerdocio a través de la Congregación de los Misioneros Combonianos en uno de las zonas más peligrosas del planeta, la Republica Centroafricana. En el año 2000 fue ordenado obispo de Bangassou y lleva en esa zona 34 años junto al pueblo sufriendo los estragos de la guerrilla de Joseph Kony, primero, y de los fundamentalistas musulmanes después. Para que os hagáis una idea del genocidio que se está viviendo en esa zona, entre julio y agosto más de 200 personas fueron degolladas por lo radicales islámicos solo en la zona de Bangassou. Juan José dice que se queda con su pueblo “contando sus lágrimas”. Se le conoce como el obispo de los pobres.
Con la ayuda de instituciones públicas y privadas ha construido varios hospitales entre los que se cuenta el Buen Samaritano, que ofrece asistencia a embarazadas, enfermos de VIH y realizan operaciones quirúrgicas. No sabes las ganas que tengo de leerme tu libro “Solo soy la voz de mi pueblo” que se publica en los próximos meses y que debe estar lleno de valiosas enseñanzas.
En esta jornada mundial de las misiones quiero deciros a los 167 misioneros de la diócesis de Córdoba que no estáis solos, que seguimos muy de cerca lo que hacéis y que sois luz para mucha gente. Vuestra convicción, vuestra determinación en permanecer en sitios hostiles solo para ayudar a los demás y dar a conocer el evangelio, vuestras ganas y sobre todo vuestra generosidad son ejemplos esenciales en los tiempos que vivimos. Para mi es un honor poder recibir y presentar a Monseñor Juan José Aguirre, obispo de Bangassou, para el pregón de lanzamiento del Domund 2024.