El obispo de Makeni, en Sierra Leona, agradece en un vídeo para las Obras Misionales Pontificias la labor de los misioneros y su propia vocación cristiana y sacerdotal, fruto de esta. Mons. Bob John Hassan Koroma, lo dice él, es una de las muchas vocaciones surgidas del ejemplo de vida de los misioneros que llegaron a su país.

“Quiero darles las gracias desde el fondo de mi corazón”, dice en su vídeo testimonio, “quiero agradecerles por lo que los misioneros europeos han hecho por nuestra tierra. Soy producto de los misioneros. Soy un fruto, soy un sacerdote de Makeni, gracias a los misioneros que vinieron aquí. Vengo de un hogar musulmán, de un entorno musulmán, y a través de la escuela me hice finalmente católico. Después fui al seminario y llegué a ser sacerdote. Gracias a Dios por eso. Nunca pierdan el ánimo, que sepan que han tenido un gran impacto en el área de la evangelización, en esta parte del mundo, no solo en cuestiones de fe, sino también en la promoción de la dignidad y el bienestar de nuestro pueblo”.

Mons. Koroma fue nombrado obispo de Makeni por el Papa Francisco el 11 de febrero de 2023. Nacido en 1971 en Kamabai, muy cerca de la ciudad de Makeni, la noticia de su nombramiento llenó de alegría a la comunidad cristiana porque era un sacerdote muy apreciado. Se ordenó sacerdote en 1999 y gracias al apoyo de la Obra Pontificia de San Pedro Apóstol, con la campaña de Vocaciones Nativas, pudo formarse en Roma, donde obtuvo la Licenciatura en Sagrada Escritura por el Pontificio Instituto Bíblico y el Doctorado en Teología Bíblica por la Universidad Pontificia Urbaniana de Roma.

Ahora, está al frente de la diócesis de Makeni, que se extiende por la mitad de Sierra Leona en la zona norte. Aquí siempre ha habido una gran mayoría musulmana y, hasta mediados del siglo XX, casi no había presencia misionera. En 1950, gracias a la labor de un pequeño grupo de misioneros javerianos, se erigió una prefectura apostólica que, en 1962, se convirtió oficialmente en la primera diócesis del país.