Phnom Penh: 185 bautismos en la Vigilia de Pascua
- On 2 de abril de 2024
OMPRESS-CAMBOYA (2-04-24) La Iglesia camboyana ha vivido con alegría el hecho de que 185 catecúmenos en el Vicariato Apostólico de Phnom Penh hayan recibido el bautismo junto con los demás sacramentos de la iniciación cristiana. Los católicos son poco más de 20.000 en un país de 17 millones de habitantes. Según informaba a Fides, el Vicario Apostólico de Phnom Penh, Mons. Olivier Schmitthaeusler, los catecúmenos procedían de una decena de distritos de la zona de Phnom Penh. En 2023, la Iglesia camboyana bautizó a un total de 397 jóvenes durante la Vigilia Pascual (167 en la prefectura apostólica de Battambang, 126 en la prefectura de Kampong Cham, 104 adultos en Phnom Penh).
Muchos de los nuevos bautizados conocieron y se interesaron por la fe católica gracias al compromiso de los cristianos con las obras educativas, sociales y caritativas de la Iglesia. Según las directrices del catecumenado de adultos seguidas por la Iglesia local, los candidatos que deseen abrazar la fe católica deben seguir un curso de formación y catequesis durante aproximadamente dos años, integrándose en una comunidad parroquial y participando en su vida, para aprender los fundamentos de la fe y conocer la Sagrada Escritura y la liturgia.
Gaspar da Cruz, un misionero dominico portugués, fue el primero en lleva la fe católica a tierras camboyanas, en 1555. A pesar de la colonización francesa en el siglo XIX, el cristianismo tuvo poca influencia en el país. Según las estadísticas de la Santa Sede, en 1953 había 120.000 católicos en el país, de los que 50.000 eran vietnamitas, lo que convertía al cristianismo en la segunda religión más numerosa en aquel momento. En 1975, con la llegada los jemeres rojos al poder comenzó el país sufrió un verdadero genocidio. El 14 de abril de 1990, se considera el día de la Resurrección de la Iglesia camboyana. Aquel día, el padre Émile Destombes, sacerdote de las Misiones Extranjeras de París, que había sido misionero antes de la persecución, pudo celebrar Vigilia Pascual en un cine (Chenla) en Phnom Penh. Según recuerdan los presentes, el apagón eléctrico que tuvo lugar dejó solo la llama del cirio pascual en aquella sala oscura. Fue como un signo de esperanza.