OMPRESS-MALAWI (2-04-24) Desde hace un mes está en marcha un proyecto de la Comisión Católica de Desarrollo en Malawi, para alejar el espectro del hambre de cientos de familias de este país, que ocupa el puesto 172 en el Índice de Desarrollo Humano. Se trata de una amenaza real a la que la Iglesia, en las crisis que se han sucedido, siempre ha hecho frente. Según la ONU, la actual crisis alimentaria en Malawi, es la peor de la última década.

La Conferencia Episcopal de Malawi, en colaboración con el Fondo Católico Escocés de Ayuda Internacional (SCIAF), ha lanzado un proyecto de transferencia de efectivo por valor de 250.000 libras esterlinas (452 millones de kwachas, la moneda del país) en respuesta a la crisis de hambre que se está sufriendo. El proyecto tiene como objetivo ayudar a 4.500 hogares afectados por el hambre en Malawi en los diez distritos de Chikwawa, Nsanje, Phalombe, Zomba, Machinga, Karonga, Dedza, Nkhotakota, Dowa, Karonga y Mzimba.

El obispo de Zomba y presidente de la Comisión Católica de Desarrollo en Malawi, Mons. Alfred Chaima, explicaba que lo que se pretende no es otra cosa que ayudar a las familias afectadas por el hambre a comprar alimentos durante este duro periodo. Se trata de una solución a corto plazo, pero que será un verdadero alivio para cada hogar. Mons. Chaima agradeció el apoyo de Escocia, que hizo llegar el dinero para afrontar el proyecto que ayudará “a los hogares más afectados por la actual crisis alimentaria”. La Iglesia católica está trabajando en todos los distritos afectados junto con los departamentos gubernamentales pertinentes, para evitar la duplicación con iniciativas similares emprendidas desde otros ámbitos. El proyecto se inspira en las palabras de la Escritura que dice “Nunca dejará de haber pobres en la tierra; por eso, yo te mando: Abre tu mano a tu hermano, al indigente, al pobre de tu tierra” (Deuteronomio 15, 11).