OMPRESS-VENEZUELA (27-06-23) Con la presencia del padre general de la Compañía de Jesús, Arturo Sosa, venezolano de nacionalidad, se celebrará el siglo que ya llevan los jesuitas, al menos desde su restauración, en el país sudamericano. El lema de esta celebración, “100 años educando y construyendo país”.

En realidad los primeros jesuitas llegaron desde Bogotá en el siglo XVII. Fueron los grandes exploradores del Orinoco. Todos tuvieron que abandonar Venezuela en 1767 tras el decreto del rey de España, Carlos III, que los expulsaba de los territorios de la Corona española. En tiempos modernos, tras su restauración, los jesuitas volvieron a Venezuela en 1916, invitados para dirigir el Seminario Metropolitano de Caracas. Cuatro años después se inauguraba el nuevo edificio en la Sabana del Blanco (actualmente Universidad Santa Rosa). Y a partir de aquí se fueron añadiendo fundaciones y nuevas casas, llegando a atender hasta cincuenta parroquias, si bien la educación sería la aportación más reconocida de los jesuitas en Venezuela, destacando la Universidad Católica y la Fundación Fe y Alegría. Todo ello sin olvidar la labor social, con la promoción de innumerables cooperativas por todo el país.

Por todo esto, la Compañía de Jesús ha escogido el lema “100 años educando y construyendo país”, sobre todo cuando se enfrentan a grandes desafíos para llevar adelante su misión “con fe y generosidad en medio de tanta adversidad en esta hora aciaga que vive nuestro país”.

El padre Sosa visitará la zona de frontera en los estados de Táchira y Apure para reactivar la región apostólica Interprovincial de Frontera (RAIF) y estrechar así la relación con Colombia que “hoy acoge a más de dos millones de migrantes venezolanos”. Estará también en Ciudad Guayana, región del sur en el estado de Bolívar, para reunirse con colaboradores vinculados con la pastoral de ecología integral y defensores de derechos humanos. Se trata de una región en la que el gobierno de Maduro ha emprendido proyectos de minería y ha habido violación sistemática de derechos humanos contra pueblos indígenas.