OMPRESS-SEGORBE (31-05-22) Este es el título del libro de Salvador Prades, delegado de misiones de Segorbe-Castellón. Un homenaje a quienes hicieron posible la historia misionera de la diócesis en tierras africanas, precisamente en Burkina Faso, la “tierra de los hombres íntegros”. Fue en 1965 cuando llegó el primer sacerdote misionero de Segorbe, Ricardo Miralles, cuyos restos reposan hoy frente a la iglesia de Safané, uno de los lugares donde se vivió esta entrega misionera.

El libro quiere, según el autor, también él misionero en Burkina, que no se pierda esta historia que durante más de cincuenta años unió a las diócesis de Segorbe-Castellón y de Nouna-Dédougou. Por eso, es un libro “archivo”. Es un acto de agradecimiento el recordar a aquellos misioneros que abrieron nuevos caminos a la evangelización allí y que dieron impulso y conciencia misionera aquí. Son los nombres de sacerdotes diocesanos misioneros que siguieron a Ricardo Miralles: Juan Antonio Albiol, Manuel Mechó, Joan Llidó, Eduardo García, Juan José Ventura, Antonio Climent, Antonio Caja y también el propio autor, Salvador Prades.

Un agradecimiento que se extiende a los obispos y a los fieles de las dos diócesis. A los seglares que se sumaron a esta misión, a médicos y enfermeras y a las Hermanas de la Consolación, a las Carmelitas Descalzas y a muchos otros que van apareciendo en las páginas del libro.

El libro tiene tres partes. “Pequeñas historias de una historia” es un relato que hace Ricardo Miralles sobre los primeros años de la Misión. Después, en “Viaje por el desierto”, también obra de Ricardo Miralles, se cuentan las peripecias de un viaje que hizo desde Castellón hasta Safané atravesando el desierto del Sáhara a finales de 1974”. “Cartas desde la Misión” es una recopilación de cartas dirigidas a la Delegación Diocesana de Misiones de Segorbe-Castellón.